lunes, 12 de noviembre de 2012

SALINAS DEL TINTO

San Juan del Puerto es un municipio español de la provincia de Huelva, Andalucía. Cuenta con una población cerca de los 8000 habitantes. Su extensión superficial es de 45 km² y tiene una densidad de 152,9 hab/km². Por su cercanía a la capital ha aumentado en los últimos años de manera importante su población. Entre otros, su economía se sustenta en el sector industrial y agrícola.

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Su término municipal se encuentra dentro de la denominada Tierra Llana de Huelva, con importantes espacios de marisma y esteros procedentes del Río Tinto. Situada en los antiguos caminos entre Huelva y Sevilla se encuentra muy cercana a la capital y a las localidades de Trigueros, Lucena del Puerto y -ante todo- Moguer.

Es por las marismas que posee, la razón de la publicación de este blog. Ya que la riqueza que posee tanto es especies botánicas como avícolas, han llevado a la necesidad de crear por parte del Ayuntamiento de la localidad el Paraje Natural denominado " Salinas del Tinto ". Y el que publica, no ajeno a esta circunstancia, ha querido aportar su granito de arena, para ofrecer a todo aquel que se interese por esta cuestión, las bellas imágenes que se pueden apreciar en las mismas, reclamando más atención, cuidados y celo, tanto a las instituciones locales, provinciales y regionales, como al aprovechamiento idoneo y responsable por parte de todo aquel que acceda a este singular y maravilloso paraje.

-Lo que hoy cuidemos, servirá de legado para el futuro de los que lleguen-

Comenzamos nuestro recorrido atravesando los railes ferroviarios de la travesía Sevilla-Huelva, y en el que podemos encontrar la casa ferroviaria y la estación de San Juan del Puerto.




Si seguimos nuestro recorrido, por detrás de la casa ferroviaria accedemos al paraje natural que nos lo indica la señalización. Más adelante encontraremos un sendero interpretativo en el que podremos leer:


El paraje natural " Salinas del Tinto " constituye un ecosistema húmedo y salino de un incomparable interés natural y se caracteriza por su singularidad ecológica y su extrema fragilidad ante cualquier alteración. Su posición estratégica en la confluencia entre Europa y África, y entre el Mar Mediterraneo y el Océano Atlántico, acentúa todavía más su alto interés natural, siendo una zona con gran riqueza de avifauna.











Las marismas del río Tinto son de hecho uno de los parajes más singulares y bellos de Europa.

La marisma se define como un ambiente costero en el que confluyen las aguas continentales del río Tinto y las aguas marinas, originándose un proceso intenso de sedimentación de las arcillas y lodos arrastrados por el río.

De esta forma aparece un sustrato fangoso muy dinámico, periódicamente inundado por las aguas salinas de la pleamar con altas concentraciones de nutrientes, lo que determina de esta forma una mayor productividad primaria de los diferentes ecosistemas costeros y la gran riqueza de organismos vegetales y animales que sustenta.





El valor de la marisma no solo estriba en la importante aavifauna que acoge, sino también por ser el hábitat de especies vegetales muy particulares y adaptadas a ambientes halófitos extremos, pues resisten altas concentraciones salinas y periodos largos y frecuentes de encharcamiento.
Durante el recorrido del sendero, que tiene una longitud de 250m y de dificultad baja, se tiene la oportunidad de observar el paisaje marismeño, las plantas más significativas y, con algo de suerte y paciencia, algunas de las aves más bellas que lo pueblan.
                                
                                 Ejemplos de plantas halófitas. En ellas se puede observar como se desarrollan con el exceso de sal a sus alrededores.

A continuación os propongo un paseo fotográfico a través del sendero interpretativo, en el que veremos las propias salinas con su superficie de sal, confundiéndonos con una nevada característica. Llegaremos al muelle de San Juan del Puerto ( por si alguien tenía dudas de que " ¿el Puerto a San Juan de que le viene? " ), observaremos como ejemplo más característico de aves que contiene el paraje, a la cigüeñuela, entre muchas otras, y por último nos adentraremos en la flora de las salinas, pudiendo comprobar la belleza que se esconde en la misma, cerrando nuestra visita cuando el día se echa y en breve le da paso a la noche, como despedida testimonial e invitación a todo aquel que esté leyendo estas líneas, para comprobar in situ, todo lo que aquí se ha expuesto.